I. Junio 2010. LA DECISIÓN

Mis sospechas quedaron confirmadas cuando por fin Malagueto abordó el asunto y dejó a las claras lo que había estado tramando. Se acercó a Vitorino, que reposaba en el sofá cual Majo Panza Arriba, y lo soltó con un tacto totalmente innecesario:

- Mira, Vitorino, quería comentarte algo importante. He estado pensando, y bueno… como tenemos un año entero libre por delante, pues… le he dado bastantes vueltas, y he llegado a la conclusión de que podíamos, en fin... no sé qué pensarás, pero...
-Vale, genial.
-¿Genial qué?
-Que me parece bien, me apunto.
-Si no sabes lo que voy a decir.
-Da igual, acepto.  ¿Vas a la cocina?... Tráeme las galletas…
-Pero mira, que esto es serio, es que... te iba a proponer dar la vuelta al mundo.
-Las de chocolate, porfa.

En Vitorino no se sabe dónde acaba la flema y dónde empieza la total inconsciencia, seguramente porque no  existe una delgada linea que las separa, sino que las une.  El caso es que como siempre, Malagueto acabó siendo el sorprendido.

Ahora me cuadraba todo. Por eso estaba el atlas al lado del GymForm 8. Por eso los DVDs de Williy Fog. Por eso la mochila con brújula de Hello Kitty... Yo estaba furioso. Estos tíos pretendían largarse de nuevo (vuelta al mundo??), y seguro que yo no entraba en sus planes. Alucino pan de molde, sólo me quieren como esponja de repuesto. Me quedé sin Brasil, me quedé sin Islandia, sin Talilandia, y peor aún, me quedé sin Guijuelo. Pues la vamos a tener, porque yo a ésta me apunto. Vamos, que juro por mis cortezas que... ¡¡ AQUÍ NO ME QUEDO !!

¡¡NO ME QUEDO !!